Vi por primera vez Flash Gordon, la película de 1980 en una cutre-discoteca del pueblo en que veraneaba, que además, curiosamente, se llamaba «Galaxia 2000».
Una sala oscura con una TV en color elevada y unos sofás para sentarse.
Quedé impactado desde ese día, pero algo no encajaba… si ya corría por mis venas la saga Star Wars, de Lucas, (que ese mismo año nos regalaba «El Imperio Contraataca«)… ¿Por qué entonces me gustó tanto esta cutre-peli?
¿Por la poderosa música de Queen? No, eso sucedería más tarde…
Sinceramente, porque se acercaba a la cutrez, a la falta de medios de mis queridas series de niño, Mazinger Z, Space 1999, Star Trek…
¿Pero cómo podía ser? Se notaba buen presupuesto detrás… Dino de Laurentis, buen reparto, grandes diseños conceptuales, chicas tan guapas como las que dibujaba Raymond… algo no encajaba aquí…
Bueno, parece que las cosas no se hicieron bien y lo que salió, (y creo que más por casualidad que por intenciones) una cinta de culto semejantes a las Series B. Una Serie «B» de lujo, diría mas bien…
Por razones que ya os contaré me he implicado en una exposición colectiva propuesta por mi amigo Emilio Gonzalo, director de Expocómic y que se exhibirá en la edición de este año.
Mientras avanzo en las obras y ya que estoy estudiando al personaje, obra de Raymond y legado, os iré contando cosillas de interés que, espero, os guste saber.
Pasen por favor y acomodense en el patio de butacas. El viaje va a comenzar…

Entre muchas cosas que iremos viendo os contaré la tremenda influencia que este personaje tuvo en la Star Wars de Lucas… ¿sabíais que George intento hacer Flash Gordon y no pudo porque los derechos los tenia Dino de Laurentis?
Eso le obligó a crear sus propios personajes… ¿curioso, eh?
Y tras el éxito de Lucas (1977), que elevó el género de la fantasía- ficción a lo mas alto… Dino quiso subirse al tren dando salida por fin al personaje… (recordemos que el Supermán de Richard Donner (1978), también fue un gran éxito de taquilla).
Bien, aquí os dejo mis progresos hasta ahora… más unas curiosas fotografías que he encontrado por la red…
Alex se distinguió, entre otras cosas, por el extraordinario dominio de la figura humana… y además dibujaba unas tías estupendas: Dale, Frigia, Aura…
Eso, como siempre digo, tiene efectos secundarios, una «agradable sorpresa» que nos pasa a los que decidimos apostar por ilustrar la belleza femenina…
¡Me alegra tener algo en común con el amigo Raymond!
